El estudio, que aparece en la revista Nature Communications, revela que eventos como la insuficiencia cardíaca o el infarto de miocardio tienen un mayor riesgo de ocurrir después de una fractura de cadera. Los científicos notaron una falta significativa de atención en el manejo de esta condición.
Muchas personas desconocen las complicaciones graves y el riesgo de mortalidad asociado con las fracturas. La investigación muestra que las fracturas de cadera pueden desencadenar o empeorar eventos cardiovasculares. Utilizando inteligencia artificial, se identificaron subtipos de pacientes con fracturas y se descubrió que aquellos con antecedentes de insuficiencia cardíaca o arritmia tienen un mayor riesgo de sufrir eventos cardiovasculares después de una fractura de cadera», dijo el profesor asociado Cheung Ching Lung de la Universidad de Medicina de Hong Kong.
Estos hallazgos podrían llevar a tratamientos personalizados para pacientes con fracturas de cadera, reduciendo la probabilidad de complicaciones y mortalidad posterior a la fractura. También podrían abrir el camino para el desarrollo de estrategias más precisas y clínicamente adecuadas en el futuro.
Los investigadores utilizaron Big Data e inteligencia artificial para descubrir características clínicas ocultas en pacientes con fractura de cadera de diferentes etnias. Analizaron registros médicos electrónicos de más de 100.000 pacientes en Hong Kong y el Reino Unido, encontrando una tasa de mortalidad un 17% mayor que la de pacientes con cáncer de mama, tiroides y próstata.
Además, descubrieron que el grupo relativamente sano de pacientes tenía un menor riesgo de eventos cardiovasculares en comparación con aquellos con enfermedades metabólicas o antecedentes de insuficiencia cardíaca congestiva o arritmia.
El riesgo de hospitalización y mortalidad por todas las causas es mayor en aquellos con enfermedades metabólicas y antecedentes de insuficiencia cardíaca o arritmia en comparación con las personas sanas con fracturas de cadera.
Basándose en estos hallazgos, los investigadores enfatizaron la importancia de controlar el riesgo de eventos cardiovasculares en el tratamiento de las fracturas de cadera. Destacaron la necesidad de abordar el riesgo en pacientes con insuficiencia cardíaca o arritmia.
El equipo de investigación también encontró un riesgo significativamente mayor de eventos cardiovasculares adversos en los 60 días posteriores a la fractura, sugiriendo que la fractura en sí misma puede contribuir a este riesgo a corto plazo.
La calcificación vascular es un factor de riesgo conocido de eventos cardiovasculares. La liberación repentina de calcio en sangre después de una fractura de cadera puede aumentar el riesgo de accidente cerebrovascular y enfermedad cardiovascular. Por lo tanto, es crucial gestionar rápidamente el riesgo de eventos cardiovasculares después de una fractura de cadera.
El estudio fue realizado por el estudiante de doctorado Warrington, Hsu Wenqiang, y Zhang Xiaowen, del mismo departamento que Cheung. También participaron el Dr. Sing Chor Wing, el profesor Ian Wong Chi Kei, el Dr. Wallis Lau Cheuk Yin del Departamento de Farmacología y Farmacia, y la Profesora Kathryn Tan Choon Beng del Departamento de Medicina de la Facultad de Medicina Clínica.