Los cinco sindicatos de Educación ANPE, CCOO, Suatea, UGT y CSIF han firmado este lunes un preacuerdo con la administración que permite desconvocar la huelga en la enseñanza que alcanzaba ya su octava jornada. Lo han hecho tras siete horas de reunión y con las críticas de algunos docentes, pero asegurando que «es un buen preacuerdo».
Tras exponer el acuerdo a la salida de la reunión los representantes sindicales han tenido que escuchar los pitidos y las duras críticas de los docentes que les esperaban en el exterior del edificio y que les han acusado de «haberles vendido».
«Es un paso atrás», «manos arriba esto es un atraco» o «Barbón dimisión», han sido algunos de los gritos que han recibido los representantes de los sindicatos, que han tratado de explicarles a los docentes concentrados las bondades de la propuesta acordada.
Desde ANPE, Gumersindo Rodríguez ha indicado que las medidas acordadas «son el fiel reflejo de la presión del profesorado, de la actividad sindical y son propuestas que van a ser juzgadas en la justa medida en el momento en el que sean aplicadas».
Así ha indicado que se trata de medidas que mejoran la escuela pública, mejoran también la relación salarial de los empleados y el conjunto es «satisfactorio». «Es verdad que se nos han quedado cosas en el quintero, pero en una negociación es evidente que no se consigue todo», añadió.
Por parte de CCOO, Borja Llorente manifestaba a los medios que se trata de un preacuerdo que «partía de lo posible a lo necesario, pero que se queda en el término medio, porque en una negociación todos tienen que ceder».
«Es un acuerdo que significa una mejora cualitativa de la escuela pública histórica. Nunca antes había habido un desembolso tan enorme de recursos, de contrataciones de profesionales de atención a la diversidad, de la red asturiana, como el que va a haber este año», indicó Llorente en declaraciones a los medios.
El representante de Suatea, Miguel Laria, ha incidido en que después de tres días «bien largos de negociación han llegado a un punto en el que están razonablemente satisfechos». Así ha manifestado que el preacuerdo recoge temas de «reivindicación histórica que impactan de verdad en la calidad educativa, como puede ser la reducción de ratios».
«Esto no significa para nada firmar la paz social, no significa que los dos años que nos queden por delante hasta las próximas elecciones, los sindicatos ya bajamos los brazos», dijo.
Desde UGT, Cristobal Puente ha señalado que como en todas las negociaciones, «uno no queda de todo satisfecho», pero desde UGT «entienden que es un acuerdo moderadamente razonable». «Creo que va a ser incluso mejor cuando repose un poco y todo el mundo vea el alcance de esas medidas», ha manifestado.
«La cuestión salarial no era la fundamental. Hemos preferido, probablemente, que la subida salarial no fuera todo lo que el profesorado deseaba, pero bueno, estamos hablando de una importante inversión que probablemente no va directamente al bolsillo del profesorado, pero va a mejorar las condiciones laborales, va a mejorar las condiciones en las que se presta la enseñanza pública en Asturias, y por eso lo valoramos positivamente», manifestó.
Uno de los más críticos con el preacuerdo alcanzado ha sido el representante de CSIF, Jorge Caro, que no obstante ha indicado que se les pidió unidad sindical desde el primer momento y en aras de unidad sindical salen con esta desconvocatoria de huelga a falta de la ratificación por parte de las organizaciones.
Caro ha añadido que el acuerdo entienden que es positivo en cuanto a que salen con algunas cosas que no tenían antes de entrar. «Evidentemente está lejos, está muy lejos de lo que nosotros pretendíamos y de lo que nosotros consideramos que sería el objetivo para mejorar la calidad de la Escuela Pública Asturiana y poder llegar a todos los cuerpos docentes», dijo, Caro que además afirmó que «era esto o nada».