Según Forbes, Elon Musk ha despedido a Omead Afshar, jefe de manufactura y operaciones de Tesla en América del Norte y Europa. Tanto CNBC como Bloomberg corroboraron el informe. La salida de Afshar sigue a la de Milan Kovac, jefe de ingeniería del robot Optimus de Tesla, quien dejó la compañía a principios de junio.
Afshar fue ascendido al cargo el año pasado, según informa Bloomberg, después de trabajar para varias compañías propiedad de Musk desde 2017. El momento de su salida no es especialmente sorprendente dada la dificultad que Tesla ha enfrentado en la venta de autos. Las ventas en Europa han disminuido por quinto mes consecutivo y la Asociación de Fabricantes de Automóviles Europeos informa que las matriculaciones de nuevos Teslas cayeron casi un 41 por ciento en mayo. La compañía también está luchando en China, donde las ventas cayeron un 15 por ciento en el mismo mes.
Aunque Musk parece responsabilizar a Afshar, la culpa claramente recae en Musk. Ayudar a financiar la reelección del presidente Donald Trump en los EE. UU., llevar a cabo los destructivos esfuerzos de recorte de costos DOGE después de su elección y simplemente mantener una presencia pública nociva han manchado permanentemente a Musk y sus compañías. Mientras que SpaceX sigue beneficiándose de contratos gubernamentales, las ventas de Tesla son vulnerables a la opinión pública, algo que el movimiento Tesla Takedown ha estado aprovechando a su favor con protestas frente a los concesionarios de la compañía.
Despedir a Afshar, dejar su cargo en el gobierno de EE. UU. y lanzar el servicio de robotaxis de Tesla en Austin son intentos diferentes de Musk para cambiar la narrativa en torno a Tesla. Aún no está claro si realmente ayudarán.