El futbolista Robin Le Normand se ha convertido en nuevo embajador de Save the Children para apoyar a niños en situación de vulnerabilidad coincidiendo con el Día Internacional del Deporte para el Desarrollo y la Paz, que se celebra este 6 de abril.
«Siempre he pensado que tuve mucha suerte de pequeño al tener una familia que me apoyó mucho, tener hermanos que han estado en todos mis éxitos. Me he dado cuenta de que había muchos niños que no vivían lo mismo. En Save the Children he encontrado a personas que piensan como yo y que intentan dar su máximo, para apoyarles, ayudarles y darles una esperanza en su futuro», ha explicado el futbolista.
Robin Le Normand considera que es esencial que todos los niños tengan igualdad de oportunidades. «No se trata solo de darles un balón o unas botas, sino de que tengan las mismas oportunidades. Por eso me uno a Save the Children, porque cada pequeño gesto cuenta y porque fuera del campo también podemos marcar la diferencia», asegura.
El joven nació en 1996 en Pabu (Francia) y desde niño soñó con convertirse en futbolista profesional. Ese sueño que parecía tan lejano comenzó a tomar forma cuando, con 11 años, fue reclutado por los ojeadores del Stade Brestois, donde inició su formación en las categorías inferiores.
Con 19 años, Robin tomó una de las decisiones más importantes de su vida: dejar su hogar para probar suerte en España. Firmó con la Real Sociedad B, donde destacó rápidamente, debutando en el primer equipo en la temporada 2018/19. Durante los años que pasó en la Real Sociedad, se ganó un lugar como titular.
En 2023, Robin decidió nacionalizarse español y ese mismo año debutó con la Selección Española, con la que ganó la Liga de Naciones de la UEFA y, un año después, la Eurocopa 2024, consolidándose como uno de los pilares defensivos del equipo. En 2024, su carrera dio un nuevo giro al fichar por el Atlético de Madrid.